INFORME DELGADO
El hallazgo de la cinta VHS en la habitación 3327 del hotel New York, así como los posteriores descubrimientos que se obtuvieron, generaron una ingente cantidad de documentación que actualmente constituye el grueso de lo que se denominó secretamente “Proyecto NewYorker3327” (ref.NewYorker3327). Entre la multitud de informes que la Oficina de Inteligencia Científica solicitó a los diferentes expertos mundiales en la figura de Nikola Tesla destacó, por méritos propios, el realizado por el especialista Miguel Ángel Delgado, que inmediatamente pasó a ser conocido entre los círculos internos como el “Informe Delgado”.
Reproducimos una parte de este informe muy popular dentro del proyecto y que constituye un compendio inmejorable de “las nueve -múltiplo de tres- cosas que debes saber sobre Nikola Tesla”.
Las nueve cosas que debes saber sobre Nikola Tesla
ref.NewYorker3321-23456a-doc.Informe Delgado.Ed.Turner 2011
[...] conviene establecer unas referencias nítidas que el lector debe tener en cuenta, para enfrentarse luego a los aspectos más increíbles o literarios. Y esto es, que si Nikola Tesla merece ser recordado es por sus logros verdaderos, objetivos y medibles, los únicos que fijarán su lugar en el mundo. A saber:
1. Que Nikola Tesla es el descubridor de la aplicación más importante derivada de la corriente alterna, el motor de inducción polifásico, el verdadero responsable de que la electricidad pasara de ser un fenómeno más o menos llamativo y apasionante a ser una verdadera fuerza que transformó los medios de transporte y la vida cotidiana. Tanto es así, que su diseño original apenas ha cambiado en la mayor parte de los motores eléctricos existentes.
2. Que la tecnología creada por Nikola Tesla fue la única capaz de iluminar grandes ciudades y enviar la electricidad a miles de kilómetros de distancia; gracias a ella, los tímidos balbuceos puestos en marcha por Edison tuvieron un impulso definitivo cuando la compañía de George Westinghouse, utilizando las patentes de Tesla, ganó el concurso para iluminar y electrificar la Exposición Colombina de Chicago de 1893, la aún hoy impresionante Ciudad Blanca.
3. Que gracias a Nikola Tesla fue posible construir la primera gran central hidroeléctrica del mundo, situada en las cataratas del Niágara, y capaz de suministrar energía a un quinto de la población estadounidense al poco tiempo de su inauguración, en 1896.
4. Que Nikola Tesla exploró las posibilidades de la “luz fría”, y que sus investigaciones fueron cruciales para el desarrollo de lo que más tarde hemos conocido como fluorescentes.
5. Que Nikola Tesla fue uno de los primeros en alertar sobre la escasez de los recursos energéticos. Que cuando la industria derivada del petróleo apenas empezaba a extenderse y prácticamente no existía lo que hoy conocemos como conciencia ecológica, ya advirtió de la necesidad de explorar otras fuentes de energía en principio inagotables, como la solar, la eólica o la geotérmica.
6. Que Nikola Tesla comprendió, con mentalidad visionaria, las posibilidades que ofrece la transmisión inalámbrica de electricidad. Que, fruto de sus descubrimientos, en 1898 hizo la primera demostración pública de un barquito dirigido por radiocontrol (que, por cierto, no interesó a nadie), e hizo innumerables demostraciones a visitantes ilustres en su laboratorio de lámparas y bombillas que se encendían en ausencia de cable alguno, respondiendo a la energía con la que llenaba el ambiente de la sala.
7. Que, a partir de sus investigaciones, vio clara la posibilidad de una telegrafía sin hilos que, en última instancia, no es otra cosa que lo que hoy conocemos como radio. Que registró una serie de patentes que se revelaron cruciales para que Marconi pudiera transmitir, en 1901, la primera señal radiofónica trasatlántica, que fue la letra “S”. Que en 1943, y como consecuencia de la controversia que rodeó la paternidad del invento de la radio, el Tribunal Supremo de Estados Unidos reconoció que Marconi había pirateado las patentes de Tesla para crear su prototipo, y le negó todo derecho sobre el invento para otorgárselo a Tesla (algo que no pudo disfrutar porque, para entonces, llevaba varios meses muerto).
8. Que, como un proyecto de mucho mayor calado que el creado por Marconi, Tesla inició tímidamente la construcción de una red que cubriría todo el planeta enviando grandes cantidades de energía a cualquier parte del globo, a un coste verdaderamente reducido. Un sistema que, además, permitiría la transmisión de mensajes, imágenes y sonido, en una cobertura general que adelantaba el concepto de aldea global que McLuhan estableció varios decenios más tarde. Que el primer escalón en esta magna obra tendría que haber sido la torre de Wardenclyffe, cuya construcción inició en Long Island en 1901 con financiación del poderoso John Pierpont Morgan, y que nunca se culminó porque el propio Morgan, sin dar nunca una explicación satisfactoria, dejó de sufragarlo a la mitad.
9. Que el número de inventos e ideas, patentadas o no, por Tesla a lo largo de su vida (unas setecientas) le convierten en uno de los cerebros más visionarios y capaces de la historia. Porque, más allá de que algunas de sus propuestas resultaran descabelladas, las intuiciones que le hicieron entrever líneas de investigación, artefactos y conceptos que solo con el paso del tiempo han empezado a explorarse ofrecen un sorprendente grado de acierto, como si el futuro se esforzara en parecerse al que él imaginaba: de las diversas aplicaciones de la transmisión inalámbrica de que disfrutamos hoy en día (de la radio a la telefonía móvil, del wi-fi a la aún incipiente “witricidad”, la electricidad sin cables), a los aparatos de despegue vertical, las bobinas Tesla, la turbina sin aspas, las elucubraciones sobre comunicación interplanetaria, las tecnologías capaces de alterar el tiempo atmosférico o provocar terremotos, etc.
Texto perteneciente a la presentación de Miguel A. Delgado al libro "Yo y la energía" de Nikola Tesla. Turner 2011.